jueves, 27 de marzo de 2008

POESIA EN MOVIMIENTO







CABALLOS


EL POTRILLO EN LA MARISMA DISFRUTA SU JUBENTUD. VA JUGANDO ENTRE LAS CAÑAS, VA MIRANDO EL CIELO AZUL. Y SU MADRE QUE LE DICE NO TE METAS POR LOS CHARCOS NO QUIERO QUE SE TE MANCHEN LAS CORONAS DE LOS CASCOS. GALOPANDO ENTRE LAS VACAS SE A HECHO AMIGO DE UN BECERRO, Y CON EL BEBE EN EL RIO Y SE QUEDA FIJO NIRANDO A LA HERMITA DEL ROCIO.

mi jaca

TENGO UNA JACA TORDA QUE NO LA CAMBIO PORNA. CUANDO LE CRUJO LA TRAYA NO HAY ALAMBRAO QUE LE ESTORBE NI LIEBRE QUE SE LE VAYA.

miércoles, 26 de marzo de 2008

doma vaquera




Historia de El Paddock : HOMENAJE A LOS PIONEROS DE LA DOMA VAQUERA CATALANA
Enviado por admin el 7/11/2006 3:44:43 (75 Lecturas)
La definición de este aire, la podríamos resumir como de un movimiento marchado en el cual las extremidades del caballo siguen una detrás de otra en “cuatro tiempos” bien marcados y sostenidos. Cuando las batidas del anterior y posterior de un mismo lado se acercan, el paso tiende a convertirse en un movimiento lateral, lateralizando el mismo y alejándose de un buen desarrollo. Esta irregularidad, que puede llegar a la ambladura es un perfecto enemigo del aire del paso. Es este aire donde con mejor precisión se muestran las imperfecciones de la doma. Esta es la razón por la cual no se puede pedir a un caballo al paso estar en “la puesta en la mano” nada más que en función de su grado de entrenamiento y soltura. Una reunión demasiado prematura altera todas las variantes de este aire. Por ser un aire fundamental de la Doma Vaquera, el caballo debe ir acompasado moviendo el mosquero, con impulsión y franqueza. Hay que exigir del jinete que muestre como anda su caballo, tanto en la línea recta como en círculo. En la actualidad, se puede comprobar como en pista, no se dejan ver los caballos mostrar su paso, simplemente ejecutan los movimientos que en este aire exige la hoja de trabajo sin que aprovechando los largos de pista el jinete muestre con total transparencia cual seal el alcance del paso de su cabalgadura. Dudosamente un caballo que ande mal, podrá realizar los ejercicios al paso de una forma correcta y por tanto, le será casi imposible obtener una buena nota en su hoja de clasificación. En la pista de competición, se diferencian claramente aquellos caballos que andan a la vaquera de los que son incapaces de ejercitar este aire característico en nuestra doma, con corrección. Los primeros cumplen con todos y cada uno de los caracteres que la definen, los segundos solo marcan, a veces dificultosamente, los tiempos de ese aire olvidando la impulsión, franqueza, regularidad, ritmo.... Se debe primar la sumisión por encima de la colocación, sin que esto venga a decirnos que en ningún momento debamos olvidarnos de la colocación, pero sin que este último término, sea el único a conseguir. Especialmente en los inicios de la adaptación del caballo a su novedosa actividad, pienso que el caballo no debe tener oposición a marchar hacia delante, se debe dar la máxima libertad a sus ganas de evolucionar hacia delante, olvidando un poco la colocación de su tercio anterior, que se verá corregida tras consolidar este aire de paso. Los movimientos realizados al paso con “aire vaquero” , círculos, apoyos, pasos de costado, piruetas directas e inversas, paso atrás, medias vueltas: podrán tener mayor o menor calidad, pero si no se hacen dominando y mandando en el caballo, con regularidad, ritmo, demostrando la sumisión de éste, con espontaneidad, sin repetición y monotonía, no serán genuinos de esta disciplina. La impulsión, ritmo, colocación y franqueza definen este aire de una forma tradicional, por lo que todo caballo que se presente en competición debe estar altamente sobrado de estos principios ecuestres. Hoy por hoy, la mayoría de los caballos en competición, no tienen un buen paso, están generalmente faltos de impulsión, de cadencia y difícilmente alcanzan las huellas de los posteriores a las de los anteriores. Se limitan a deambular por las pistas sin mostrar este aire tan genuino de nuestra disciplina. Pienso que, aparte de que funcionalmente exista una limitación del caballo, generalmente este defecto se debe a su precipitación y aligeramiento en su proceso de doma. Este aire ha ido evolucionando en su técnica con el paso de los tiempos, gracias a la adaptación de la mayoría de jinetes, hacia un método racional de doma proyectado a este tipo de monta. Como ejemplo del desarrollo en pista de un buen aire de paso, entre otros, recuerdo la Yegua Espléndida, bajo la magistral mano de Rafael Román Postigo así como el P.S.I. del varias veces Campeón de España, Francisco Díaz Rodríguez, de nombre " Israel". Mas recientemente, no debemos olvidar a "Látigo" de Gonzalo Corrales, el P.R.á del impúber Álvaro Múgica, "Felán" y otros más que haría interminable este artículo. Estos son algunos de los caballos vaqueros que mas se han acercado a la perfección del buen andar al paso en Vaquera.
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ENTORNO A LAS 300 PERSONAS ASISITIERON AL HOMENAJE CELEBRADO EN ESCOLA D'EQUITACIÓ FONTSCALDESHacía ya mucho tiempo que la Doma Vaquera catalana no disfrutaba de una jornada tan entrañable en la que en un mismo día pudimos disfrutar de la presencia del pasado presente y futuro de la disciplina. Trescientas personas acudieron a los actos celebrados en la Escola d'Equitació Fontscaldes, localidad cercana al municipio tarraconense de Valls, el pasado 1 de mayo para acompañar y agasajar a todos aquellos que hace años, algunos cerca de los treinta, comenzaron a disputar concursos de esta modalidad ecuestre en Cataluña. Pioneros que pese a la falta de reglamentación oficial quisieron transportar a la otra punta del mapa, como pudieron, las competiciones de una incipiente disciplina que acaba de nacer en Andalucía. Juan Antonio Lemus del Rey recordaba como hubo de redactar un reglamento previo a la edición del que posteriormente sería el oficial de la RFHE, para que los jinetes catalanes pudieran establecer unas primeras normas con las que regir sus propios concursos.Los homenajeados, jinetes y jueces de antaño, disfrutaron con el resto de los acompañantes de una espléndida jornada en la que ni tan siquiera la temida lluvia de estos días se atrevió a estropear el esfuerzo del organizador de este evento Ángel Luis Rivera Rincón.De buena ley es hacer mención de aquellos pioneros convocados ese día para recibir el cariño de todos y las placas conmemorativas de manos del Presidente de la Federació Catalana d´Hípica, Mateu Rosell, de Santiago García miembro de la Junta Directiva de la Asociación de Doma Vaquera Catalonia y del propio organizador. Nuestros pioneros: Pere Divorra, Anne Dunant, Sol Andic, los hermanos Carlos y Pere Falguera Gómez, Claudio Gallardo Mendoza, el tristemente desaparecido Lorenzo García Diez, Juan Antonio Lemus del Rey, Doroteo Mansilla, Luís Martínez, Vicente Pibernat, Josep Puig Peraire, Eduado Pla i Pou, Claudio Pot único de los homenajeados aún en activo en las pistas de competición, Joan Pot i Torres, Rafael Ulécia Anta y como no... Ángel Luis Rivera Rincón, el promotor de la idea a quién a también lógicamente se le debía el correspondiente reconocimiento aún en contra de su voluntad.Desde las 13:30 horas, en la que se daba inicio al programa con un aperitivo y unas exhibiciones de manos de Pere Divorra i Reig con "Quínola" y Joan Pot con "Brandy", representación del pasado y presente de la disciplina, se enlazaron todos los actos previstos para finalizar bien entrada la noche. En la gran carpa instalada para la ocasión se comenzó el programa previsto con una proyección multimedia en la que pudimos contemplar a nuestros homenajeados con algunos años menos según las fotografías rescatadas por ellos mismos del sus respectivos baúles de los recuerdos. Se prosiguió con un divertido y desenfado almuerzo a base de la tradicional calçotada de la zona. Continuando con el orden del día se presentó una charla/colóquio sobre la evolución de la Doma Vaquera desde sus inicios hasta nuestros días, de la mano de que quienes formarían el Jurado de Campo del CDVNB del día siguiente: Enrique Cabezas, Manuel Carvajal y José Manuel Jurado. Tras la charla se procedió a la entrega de palcas conmemorativas donde la emoción contenida se reflejaba en la voz de todos los homenajeados. La guitarra, el cante y el baile, una cena pica-pica cortesía del Comité Organizador basada en recaptas y buen cava, y un dancing a go-go pusieron punto final a la jornada homenaje y previa del Concurso nacional de Doma Vaquera que se disputaría al día siguiente en esas mismas instalaciones .